Una página web con baja velocidad puede ser dañina para tu negocio. La reputación online también se mide a través de lo rápido que se accede a tu sitio o cuándo se carga tu contenido. Por eso, debes cuidar este aspecto para que el rendimiento sea óptimo.
Los proyectos web que trabajamos en Manchasoft siempre tienen en cuenta diferentes técnicas que harán que la velocidad de carga sea la más alta. Por eso, hoy queremos compartir contigo alguno de estos trucos y que pruebes tú mismo cómo afectan.
9 consejos para que tu página web cargue más rápido
No sobrecargar la página de inicio
El inicio de tu página web debe ser limpio y directo. Nada de páginas largas llenas de información, fotografías y gráficos. Organiza bien la home y los usuarios que entren a tu web tendrán todo lo que necesitan al momento. Crea diferentes apartados como un blog o un “Sobre nosotros” para reducir la carga y mejorar la velocidad.
El contenido importante, a la zona superior
Lo primero que verán los visitantes de tu página web será la parte superior. Por lo tanto, te recomendamos que incluyas en esta zona lo más relevante y, si puede ser, lo que más rápido se cargue. Así podrá terminar de cargarse todo lo demás mientras los usuarios leen los encabezados y no afectará tanto a la velocidad o a la tasa de rebote.
Elimina archivos multimedia
Puede que te gusten los vídeos de presentación del equipo o las galerías de fotos infinitas, pero esto no hace más que ralentizar la carga de tu página web. Puedes optar, por ejemplo, por vídeos incrustados desde otras plataformas. Pero tampoco te excedas, o caerás en la misma trampa y se reducirá la velocidad.
Optimiza el tamaño de imágenes y fotografías
En una página web, la calidad es mejor que la cantidad. Elige las fotografías que más te gusten y ahórrate las demás. Adáptalas al formato JPEG, que pesa menos sin perder calidad, y a la resolución de las pantallas. Así, evitarás que imágenes muy grandes afecten a la velocidad de carga de tu sitio web.
Prioriza el texto
Como habrás deducido de los dos últimos puntos, el texto debe tener más relevancia de las imágenes y vídeos. O, al menos, la misma. Así conseguirás atraer la atención de los buscadores (si tienes una buena estrategia SEO) y mejorar la velocidad de carga de tu página web.
Reduce el número de tipografías
El consejo general es que no utilices más de dos o tres tipos de letra. Esto, por un lado, dará un aspecto coherente a tu página web, más unificado en su identidad. Por el otro, la velocidad de carga será más alta.
Evita las animaciones
Según de qué animaciones estemos hablando, puede que el aspecto que dejen en tu página web sea de los años 90. Así que destiérralas, por el bien de todos. Además, son una carga extra para tu web y harán que la velocidad sea más baja de lo habitual.
Diseña una web responsive
La navegación con dispositivos móviles es la principal forma de visitar páginas web hoy en día. Enfocar tu diseño en que se reproduzca a gran velocidad en un teléfono o tablet será primordial para que no pierdas usuarios. Busca optimizar siempre el contenido para el espacio que permite una pantalla tan pequeña.
Limita las aplicaciones de terceros
Estas Third Party Applications (TPA) son, en su mayoría, “iFrames” que tratan de cargar una página web dentro de tu web (por decirlo de manera sencilla). Como comprenderás, esto afecta a la velocidad de carga, por lo que es importante desechar las que no aporten nada valioso.